Musicoterapia

 

MÚSICA COMO EL ARTE DE ACOMPAÑAR LA SANACIÓN, LA PREVENCIÓN Y LA MEJORA DE CALIDAD DE VIDA.

La musicoterapia consiste en generar estímulos y observar las respuestas y conexiones de una persona con y desde la música para estimular cambios positivos en el estado de ánimo y el bienestar general.


Es recomendable para la mejora del sistema sensorial, cognitivo y motor. Además, estimula la creatividad, el aprendizaje, el lenguaje y la memoria. Por eso, la musicoterapia se aplica para trabajar el estrés, la ansiedad y la depresión, las dificultades de aprendizaje e incluso de socialización.


La actividad musical usada como arte terapia puede incluir crear música con instrumentos de todo tipo, cantar, moverse con la música, conectar audio perceptiblemente o simplemente escucharla.

Conocer y utilizar correctamente esta disciplina brindará a los profesionales del área de la salud una herramienta creativa de gran apoyo a cualquier tratamiento directriz.


Hoy en día la investigación sobre musicoterapia se realiza con todas las edades y enfermedades tales como Alzheimer, Parkinson, traumatismo de cráneo, autismo, demencia, pacientes psiquiátricos, niños con problemas de conducta, personas con enfermedades físicas crónicas, rehabilitación de adicciones,

entre otras.


Un estudio reciente ha demostrado que la escucha de música produce la liberación de dopamina (el neurotransmisor que participa en la detección de estímulos placenteros y recompensantes) en el circuito defensivo cerebral.


Luz Santoni




CREACIÓN MUSICAL COMO HERRAMIENTA EXPERIENCIAL PARA LA PRODUCCIÓN RESILIENTE



La musicoterapia, como actividad artística, ya expresado anteriormente, consiste en generar estímulos y observar las respuestas y conexiones de una persona con y desde la música para estimular cambios positivos en el estado de ánimo y el bienestar general.


La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce la musicoterapia como un tratamiento que, como resalta el gerente del SES, “aporta beneficio al binomio salud-enfermedad. Todo ello teniendo además en cuenta que se trata de un instrumento de cuidados muy económico y carente de efectos secundarios.

Existen dos tipos de métodologías del uso musical, uno consiste en el método “pasivo” o externo, en donde la música, los sonidos y las vibraciones frecuenciales sonoras son usadas como escucha o interrelación auditiva-vocal-física-espacial.

El otro , es activo. Experiencial. Creador.

El paciente participa activamente en la composición de la música, ya sea cantando, bailando o con la ejecución de instrumentos musicales.

Ambos, comparten el objetivo de que la persona explore y exprese sus emociones, mejore la coordinación, el ritmo y aumente su bienestar físico y emocional.

Sin embargo, el uso del método “activo” se considera generador de autosuficiencia, y encauzador de productividad, ya que además de la vivencia del proceso terapéutico, el participante logra un producto tangible que puede compartir socialmente:SU OBRA.

texto Luz SANTONI  

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